¿Qué tipo de piel tienes?
Existen diferentes tipos de piel. ¿Ya sabes cuál es el tuyo?
Existen cuatro tipos de piel básicos (biotipos): normal, grasa, seca y mixta.
Estos tipos de piel están determinados genéticamente y le dan características funcionales y visuales específicas a la piel (características que estarán presentes toda la vida). Pero también es importante que tengas en cuenta que no está todo dicho al nacer ya que la piel es un órgano vivo que experimenta cambios a lo largo del tiempo: los factores internos y externos pueden modificar las condiciones de la piel pudiendo deshidratarla, pigmentarla, sensibilizarla, envejecerla, etc…
Hay una serie de signos que aparecen en mayor o menor grado en todos los tipos de pieles y que puedes tener en cuenta para hacer tu análisis de piel y preparar tu rutina de cuidado cosmético diario:
Signos de envejecimiento: pérdida de firmeza y aparición de líneas de expresión y arrugas. Sequedad y manchas.
Cambios en la coloración: ausencia de tonalidad uniforme. Aparición de manchas vasculares y/o pigmentarias.
Producción de sebo y agua: exceso o merma en la cantidad de sebo y agua (sudor) en la superficie cutánea.
Sensibilidad: aparición de áreas rosadas o rojizas de forma intermitente o permanente. Sequedad, picor, irritación, erupciones.
Presencia de impurezas: comedones (puntos negros), pápulas, pústulas, milliums.
Conocer tu tipo de piel te ayudará elegir los cosméticos adecuados para cuidarte correctamente y puedas sentir tu piel confortable y saludable.
Los productos cosméticos que utilices para cuidar tu piel deberán mantenerla en equilibrio o ayudarte a devolver su estabilidad natural.
Será importante protegerla de las influencias ambientales como el frío, el viento, el calor, así como de las radiaciones solares. Un buen cuidado evitará el envejecimiento prematuro y mantendrá un buen nivel de hidratación cutánea.
PIEL NORMAL
PIEL GRASA
PIEL SECA
PIEL MIXTA
